Durante unos cuantos días hemos estado conociendo a un personaje de libros muy especial, Caperucita Roja. Y es que la biblioteca del colegio ha comprado este año un lote de lectura de un libro titulado "Capublicita Roja" escrito por Alain Serres e ilustrado por Clotilde Perrin para la editorial SM.
Lo primero que hicimos fue comenzar a leer el libro. Es una versión de Caperucita pero con anuncios publicitarios. Hemos entendido que no siempre hay que hacer caso de la publicidad porque a veces es engañosa y nos dice mentiras o no dice toda la verdad. Hemos visto que por ejemplo a veces ponen un precio en grande que es muy barato y luego en pequeño ponen otro más caro. Nos ha gustado el libro porque vemos que la publicidad nos enseña algo bueno y otras algo malo. Por ejemplo las zapatillas con luces, a veces nos empeñamos en comprarlas y luego no son tan cómodas porque pesan un montón y son mejores las zapatillas normales y son más baratas.
Luego, un miércoles en nuestras visitas a la biblioteca, vimos que había otro libro de Caperucita. Es el que escribieron Bruno Munari y Enrica Agostinelli que se llama "Caperucita Roja, Verde, Amarilla, Azul y Blanca" y que es de la editorial Anaya. Lo empezamos a leer. Nos gustaba mucho porque tiene muchas emociones y es muy original, nos gusta que es gracioso y cada Caperucita, con su color distinto, hace cosas diferentes.
El maestro nos contó que aunque hay muchas versiones de Caperucita, solo dos son las originales y las leímos en clase. Una la escribieron los hermanos Grimm, en Alemania. En ella Caperucita se entretiene cogiendo flores porque la engaña el lobo pero al final un leñador salva a la abuela y a Caperucita. También leímos la versión que en Francia escribió Charles Perrault, en ella Caperucita la engaña el lobo mandándola por un camino más largo y al final la abuela y la niña terminan en la tripa del malvado lobo y nadie las salva porque no hay leñador. ¡¡¡Vaya descubrimiento, no conocíamos este final!!! Alguno de los compañeros incluso cree que va a tener pesadillas con este otro lobo tragón y espera que aparezca un leñador para salvarlas.
De su casa nos ha traído muchos más a clase, casi veinte, y nos ha dicho que hay muchísimas versiones. En algunos ratos hemos ido leyendo algunos de ellos y así hemos descubierto algunas Caperucitas en verso, en cómic, en obras de teatro... Caperucitas detectives, mudas, valientes, con caramelos envenenados, modernas, motorizadas, ecológicas, de cine, enamoradas... incluso Caperucitas que terminan con un abrigo de pelo de lobo... ¡vaya con Caperucita!
En este tablero podemos ver un montón de las versiones existentes.
En este tablero podemos ver un montón de las versiones existentes.
Después en clase hemos hecho durante varios días nuestros dibujos de Caperucitas según nuestra imaginación. Hemos trabajado la ortografía para descubrir y aprender las palabras en las que podíamos cometer faltas de ortografía. En equipos hemos compuesto nuestra versión de Caperucita en 5 frases o párrafos, todo un ejercicio de resumen. También hemos escrito y dibujado el cuento en pareados. Además hemos hecho anuncios publicitarios sobre Caperucita e, incluso, hemos imaginado qué llevaría, dónde viviría, quién sería su salvador... en distintas versiones de Caperucita. Todo un trabajo de escritura e imaginación.
- La madre de Caperucita la mandó a llevar comida a su abuelita enferma.
- Caperucita Roja pasó por el bosque y el lobo la engañó.
- El lobo llega antes a casa de la abuela y se la come.
- Llega Caperucita a la casa y el lobo la engaña y la devora.
- En una versión, de los hermanos Grimm, el cazador aparece y las salva. Pero, en la versión de Perrault, el lobo se las come y termina así.
Como podéis comprobar, esta pequeña niña vestida de rojo nos ha mantenido entretenidos muchos días y ha hecho que el libro de Lengua se nos haya quedado algo pequeño porque... en sus páginas no cabían tantas y tantas Caperucitas.
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